Pánico:
Las personas con pánico experimentan una serie de sensaciones que aparecen de
forma inesperada. En la mayoría de casos, la persona siente un miedo repentino
sin saber por qué, nota malestar sin ninguna causa aparente, lo que contribuye
a que se asuste más. Es probable que además el corazón se acelere, se empieza a
sudar, puede aparecer temblor en las manos, sensación de debilidad, flaqueza;
podemos notar una fuerte opresión en el pecho unida a una sensación de ahogo,
de falta de aire, mareos etc.
Fobia social:
La mayoría de las personas ante situaciones importantes como una presentación
oral en público, una entrevista de trabajo, o una primera cita, es posible que
experimenten síntomas físicos de ansiedad como rubor, palpitaciones, temblores
o sudoración; que tengan pensamientos y dudas acerca de su actuación o de cómo
la verán y será vista por los demás; y en algunos momentos, deseen acabar
cuanto antes. Aunque la ansiedad social y la ansiedad ante la evaluación por
parte de otros, son muy comunes, la experiencia de la persona con fobia social
es mucho más grave, perturbadora e incapacitante.
Agorafobia:
Suele definirse miedo irracional a los espacios abiertos, como las grandes
avenidas, los parques o los entornos naturales.
Claustrofobia:
Las personas con claustrofobia se caracterizan por padecer un miedo intenso a
situaciones relacionadas con espacios cerrados: habitaciones pequeñas,
habitaciones cerradas, sótanos, bodegas, túneles, ascensores, el metro, etc.
Además, el temor no se centra sólo en el espacio cerrado en sí mismo, sino en
lo que podría ocurrir "dentro" de ese espacio.
Miedo a volar:
Ante estas situaciones, la persona experimenta gran preocupación y temor
producidos porque cree que algo malo va a sucederle. el miedo no sólo se
produce en el avión, sino que cuando la persona sabe que ha de realizar un
viaje que necesariamente implica volar, puede empezar a sentirse nerviosa y mal
hasta meses antes, y anticipar las cosas horribles que le van a ocurrir.
Miedo a hablar
en público: Las personas con miedo a hablar en
público, cuando tienen que enfrentarse a este tipo de situaciones, experimentan
una gran ansiedad, además, suelen pensar que van a hacerlo mal y con
frecuencia, creen que su actuación ha sido mala. Piensan que los demás se darán
cuenta de que su voz o sus manos están temblando, o creen que en cualquier
momento les puede invadir una extrema ansiedad, o que no podrán articular
correctamente las palabras, etc.
Trastorno
obsesivo-compulsivo: Las obsesiones se podrían definir
como ideas, pensamiento, imágenes o impulsos persistentes que se experimentan
(al menos inicialmente) como invasores. Las compulsiones serian conductas o
pensamientos que se efectúan de manera repetitiva y de acuerdo con determinadas
reglas, como respuesta a una obsesión.
Estrés postraumático: Cuando
una persona ha vivido o presenciado un acontecimiento en el que su vida, su
integridad física o psicológica se han visto seriamente amenazadas, decimos que
ha sufrido una experiencia traumática. Los síntomas que surge a partir de la
experiencia traumática se agrupan en lo que se llama trastorno por estrés
postraumático.
Ansiedad generalizada:
Se caracteriza porque las personas que la sufren se preocupan de forma
continua, excesiva y exagerada sobre aspectos de su vida.
Deseo sexual hipo
activo: Se trata de un trastorno caracterizado
por la ausencia o disminución del deseo, en el que existen las fantasías y
deseos, provocando malestar y dificultad para relacionarse.
Fetichismo:
Se trata de un desorden sexual en el que se necesita un fetiche u objeto
imaginario o real determinado, para conseguir la excitación sexual.
Exhibicionismo:
Es un tipo de trastorno sexual, que necesita exhibir sus propios genitales ante
otras personas de forma inesperada, para obtener placer.
Pedofilia:
Es la atracción sexual y excitación que sienten a través de la observación y
tocamiento a niños o niñas que aún no han llegado a la pubertad.
Trastorno bipolar:
Puede afectar como se siente una persona, piensa y actúa. Se caracteriza por
cambios exagerados en el estado de ánimo, desde manía a la depresión mayor.
Depresión:
El sentimiento o emoción más característico de la depresión es la tristeza que
se experimenta de forma continua e intensa; de tal manera que este estado de
ánimo parece que no va acabar nunca y además impide funcionar adecuadamente ,
interfiriendo en su calidad de vida.
Trastornos de la personalidad:
Se caracterizan por un patrón de funcionamiento rígido e inflexible, como para
experimentar dificultades de adaptación al entorno, lo cual genera en muchas
ocasiones importantes frustraciones tanto como para ellos como para la familia.
Trastorno límite de la
personalidad: Se caracteriza porque las personas que
lo sufren tienen una personalidad débil y cambiante, y duda de todo.
Trastorno delirante:
Es un trastorno psicótico caracterizado por una o varias ideas delirantes. Es
decir, que estas personas están totalmente convencidas de cosas que no son
ciertas.
Esquizofrenia:
Se caracteriza por anomalías del pensamiento, la percepción, las emociones, el
lenguaje y la conducta.
Trastorno por déficit
de atención: Trastorno crónico caracterizado por la
dificultad para prestar atención.
Juego patológico:
El jugador patológico es aquella persona que va teniendo problemas progresiva y
reiteradamente en su intento de resistir el impulso a jugar, y esta excesiva
implicación en el juego le va provocando problemas en su vida personal. Estas
personas tienen la necesidad de jugar con cantidades de dinero cada vez
mayores, para conseguir el grado de excitación deseado.
Ataques de ira:
En una explosión de ira la persona reacciona ante la injusticia u ofensa
percibidas de forma repentina y violenta. Esta violencia puede manifestarse,
gritando insultando, arrojando objetos, golpeando cosas, e incluso, agrediendo
físicamente a las personas implicadas.
Anorexia nerviosa:
Es el rechazo de la persona a mantener el peso corporal normal para su edad y
altura, o un gran deseo por tener y mantener un peso muy bajo, sin importarle
las consecuencias fisiológicas y psicológicas que conlleve.
Bulimia nerviosa:
La característica principal es la presencia de atracones de comida y de
conductas purgativas (generalmente vómitos), que ocurren de manera repetitiva.
Atracones:
Se caracteriza por la presencia recurrente de atracones de comida. Un atracón
se reconoce porque la persona ingiere una cantidad importante de alimento,
mientras experimenta una importante sensación de pérdida de control.
Hipocondría:
La característica esencial de este problema es la preocupación constante por la
posibilidad de contraer una o más enfermedades graves, o la creencia de que ya
está sufriendo. Esta preocupación hace que la persona acuda de forma
repetitiva, a consultas y a hacerse chequeos médicos.
Autoestima:
Cuando una persona se juzga a sí misma y concluye que no se gusta, que
globalmente se considera una persona poco válida, decimos que esa persona tiene
problemas de autoestima.
Comentarios
Publicar un comentario